El consejo estatal del PAN en Puebla quedó dominado por candidatos cercanos a Mario Riestra Piña, y veinte aspirantes anunciaron que impugnarán la elección por presuntas irregularidades que afectaron la transparencia del proceso. Entre los electos destacan Blanca Jiménez Castillo, Fabiola Ramírez y Rafael Micalco Méndez.
Los inconformes denunciaron presiones para declinar candidaturas, amenazas y la distribución de un “acordeón” con los nombres de candidatos favorecidos a cambio de pagos. Fernando Sarur Hernández calificó la elección como “el más desaseado en la historia interna del PAN en Puebla”.
Irma Tlacuahuac Zitlalpopoca explicó que recibió advertencias que involucraban a familiares para obligarla a renunciar a su reelección, a pesar de que cumplía con todos los requisitos.
Renuncias de candidatos contrarios a la dirigencia también marcaron la jornada, mientras la votación se realizó electrónicamente, sin boletas físicas y con escrutadores para validar los resultados.
A pesar de las impugnaciones, los allegados a Riestra consolidaron la mayoría en el consejo estatal, asegurando el control de la dirigencia sobre la estructura interna del partido.
Se eligieron consejeros vitalicios, como Roberto Grajales Espina y Enrique Guevara Montiel, mientras otros declinaron su participación por inconformidad.
La elección evidenció la división del PAN en Puebla, con enfrentamientos entre la dirigencia estatal y sectores que buscan mayor apertura y equidad interna.
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